Dejar la escuela

Todo lo bueno llega a su fin, y mi paso por el instituto Alfred Nobel como profesor suplente de computación también. Considero que ésta ha sido una de las experiencias más interesantes y positivas que he tenido en lo laboral desde hace mucho tiempo.
El reto de dar clase a niños sin duda me llenó de dudas en un principio ya que hacía casi 10 años que solo enseñaba a mayores (cursos de Photoshop, Premiere Pro, etc), sin embargo creo que logramos divertirnos y aprender. Hoy fue un día emotivo donde no faltaron lágrimas y abrazos en cada una de las aulas donde entré para despedirme.

 Me abrazaron, me estrujaron, me hicieron pelota con sus demostraciones de cariño, quise cerrar con ciertos corolarios de todo lo que habíamos aprendido en las clases que estuvimos juntos. 

Les hablé sobre lo importante que era jamás perder la capacidad de asombrarse ante lo nuevo, de saber como funcionan las cosas, el papel de la matemática en la vida ya que es más o menos lo unico que hemos hecho el último tiempo y amaron cada minuto binario.

Me llevo mil recuerdos, mil impresiones. Steve Wozniak respondiéndome un mail porque le encantó el tema de HACKERS que desarrollamos, el perfil de John "el capitan crunch" Drapper que es amigo del face y se etiquetó en las láminas de los chicos, mismo Kevin Mitnick que nos dijo que enviaría una copia autografiada de su libro GHOST IN THE WIRES, son cosas que jamás pensé que me pasarían en mi vida, pero es parte de un viaje maravilloso que pude compartir con ellos y cuanto aprendí de ellos.






0 comentarios: Publicar un comentario